Decídete a pintar las paredes de una habitación

Pintar la casa es una de las tareas de bricolaje en las que se pueden conseguir muy buenos resultados sin necesidad de tener gran experiencia.

Pintar una pared es sencillo. Claro que los profesionales de la decoración se ganan el sueldo porque ya saben lo que hace falta para hacer el trabajo y tienen las herramientas adecuadas para llevarlo a cabo.

Cuando se empiezan a hacer proyectos de decoración, las primeras veces son siempre las más difíciles. El primer problema con el que te topas es la barrera del conocimiento. Hay que saber muchas cosas para hacer el trabajo bien. Pero no hay que tener miedo porque todo se puede aprender. Aquí tienes un resumen de los pasos básicos.

Escoge el color y el tipo de pintura

Seleccionar el color y el tipo de pintura es el primer punto en la lista. Es un poco más difícil de lo que parece.

La primera decisión es si vas a utilizar pintura al aceite o al agua. Y hay también otras variedades para complicar aún más el tema, pinturas ecológicas, por ejemplo. La pintura al aceite es la preferida para exteriores por su calidad y larga duración. Las pinturas plásticas, cuya composición básica es una resina sintética, vinílica o acrílica, emulsionada en agua, son las elegidas para interiores, ya que facilitan la limpieza de manchas. Pero no hay reglas fijas. Por ejemplo, una habitación interior que recibe mucho sol durante todo el día puede quedar mejor con una pintura al aceite que con una pintura al agua.

Elegir el color es más fácil, especialmente cuando la elección solamente depende de una persona. Seleccionar un color y un tono de pintura entre más de un centenar de tonos diferentes puede dar lugar a discusiones sobre preferencias cuando hay que ponerse de acuerdo con alguien más. Muchos de los colores de pintura son tan parecidos es casi imposible imaginar cual sería la diferencia al final. Está bien empezar la selección con una paleta básica en el ordenador, pero debe pasarse rápidamente a un catálogo de muestras. Los colores, tal y como se ven en la pantalla de un ordenador, son my diferentes a como se ven una vez en la pared. Quzás incluso haya que hacer alguna prueba.

Prepara las paredes

No te olvides de reservar tiempo suficiente para hacer el trabajo de preparación que sea necesario.

La preparación puede tardar mucho o poco tiempo, dependiendo de la superficie que se va a pintar. Una pared exterior puede tener grietas, manchas de óxido y algún desgaste debido a las inclemencias del tiempo. Una pared interior puede tener pequeñas grietas, abolladuras, arañazos, pequeños agujeros que quedan después de sacar un clavo y otros defectos similares. La superficie a pintar debería ser lisa, así pues debaríasrellenar y lijar todos esos desperfectos para que la pared quede lisa y el resultado sea bueno una vez pintada. Si te has decidido a pintar la casa tu mismo, merece la pena hacer bien el trabajo de preparación. Así el resultado final será tan parecido a algo nuevo como sea posible.

Escoger la pintura, ya sea exterior o interior, y parchear las grietas es el 95% del trabajo de preparación, pero queda el otro 5%. Aunque se pueden pintar áreas grandes rápidamente con un rodillo, o un pulverizador, siempre hay que proteger las zonas cercanas para que no se manchen con la pintura. Enmascarar la línea del techo próxima a la pared evitará que te salgas. Cubrir el suelo, o los muebles que no hayas podido retirar, los protegerá de salpicaduras. Tápalos con plástico, lona, una sábana vieja, otra tela o papel de periódico.

Junta los materiales

Junta todos los materiales que necesites antes de empezar. Es obvio que necesitas la pintura, brochas, o rodillos. Pero el trabajo de preparación puede requerir yeso, cola, espátulas, lija, y otras cosas. Depende de la pintura que has escogido, puedes necesitar un kit para pulverizarla, o una varilla para removerla de vez en cuando en el bote. En el caso de la pintura al aceite, es imprescindible tener un disolvente para reparar “accidentes” o darle la consistencia deseada.

La cantidad de pintura que necesites depende del tamaño de la superficie que vas a pintar.

Es mejor que te sobre un poco de pintura.

Pinta

Una vez que tienes los materiales listos, y has hecho la preparación inicial, el harás el trabajo rápidamente y sin problemas.

Si estás pintando del mismo color que había, la superficie estaba en buenas condiciones y la preparación ha sido buena, puede que sea suficiente con una mano de pintura, aunque lo normal es que haya que dar dos. Cuando la pared estaba en malas condiciones, puede ser necesaria una tercera capa de pintura.

En conclusión

La próxima vez que toque pintar paredes en tu casa, considera si puedes hacerlo tu mismo. Pintar es una habilidad muy útil para adquirir. Y no sólo ahorrarás dinero al hacerlo, sino que también tendrás la satisfacción de haber completado el proyecto, especialmente cuando queda bien, y de disfrutar el resultado a diario sabiendo que es obra de tus manos.

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