Cantar es bueno para el cuerpo y el alma, incluso aunque sólo cantes para ti.
Cantar tus canciones favoritas puede ser un excelente ejercicio cardiovascular. Es una forma de respiración controlada, similar a la respiración yoga. Inhalas entre las frases de la canción y exhalas cuando cantas la letra. No debería sorprendernos que sea relajante y que resulte beneficioso para el corazón.
Cantar ayuda a entrenar los pulmones y quienes lo hacen tienen mayor capacidad pulmonar. También estimula el sistema inmunológico, reduce el nivel de estrés e incluso ayuda a sobrellevar el dolor crónico.
Si bien cantar solo es bueno, cantar con otros resulta aún mejor. Además del ejercicio aeróbico que supone y los beneficios para la respiración, mejora la postura, mentalidad, confianza y autoestima. Los latidos del corazón de los integrantes de un coro se sincronizan cuando cantan juntos, y esto produce un mayor efecto calmante muy beneficioso para la salud. Cantar la misma canción con un grupo tiene un efecto dramático en la variabilidad del ritmo cardiaco, y esto se relaciona con un menor riesgo de padecer enfermedades cardiacas.
Los científicos pidieron a un grupo de adolescentes que realizaran tres ejercicios corales (tarareando, cantando un himno y salmodiando) y monitorearon sus ritmos cardíacos durante cada uno. Demostraron que cantar tiene un efecto dramático en la variabilidad del ritmo cardíaco, lo que está relacionado con un menor riesgo de enfermedad cardíaca.
Así que canta hoy a pleno pulmón. Sentirás que te inunda un caudal de endorfinas, aunque falles alguna nota o te equivoques en la letra.
Y, si tienes tiempo, piensa en unirte a un coro mañana.
Cantar puede considerarse una forma de ejercicio comparable al yoga.
te hace una persona más activa