Todos deberíamos saber poner la lavadora y lavar la ropa de forma segura y eficiente. Es uan de las habilidades básicas que deberiamos adquirir.
Nadie quiere arruinar una prenda favorita mezclándola con los colores incorrectos, lavándola a una temperatura equivocada, usando un detergente que no es adecuado o poniéndola en la lavadora en un ciclo incorrecto, así que es necesario aprender a lavar la ropa sin causar accidentes y siendo eficientes, en el tiempo que le dedicamos a la tarea y sin desperdiciar energía. Claro que hacer la colada implica más tareas que simplemente poner la lavadora a funcionar.
Se empieza por clasificar la ropa por colores y temperaturas a las que se puede lavar.
Después se carga la lavadora con ropa del mismo tipo, que se pueda lavar con el mismo ciclo.
Hay que poner detergente en el compartimento adecuado, o dentro del tambor, y otros aditivos como lejía o suavizante, en los suyos .
Finalmente, se pone la lavadora en marcha. Cuando termina el lavado, hay que sacar la ropa lo más rápido posible y ponerla a secar.
Una vez seca, será necesario planchar algunas prendas, doblar y colgar en perchas otras.
Puedes mejorar cómo lo haces
Pon atención al detalle. Muchas personas prefieren poner todo junto, sin separar la ropa por colores y temperaturas. Así se corre el riesgo de estropear algo. Claro que tampoco es eficiente poner la lavadora con poca ropa. Hay que llegar al equilibrio.
Como mínimo, separa la ropa blanca, ropa de color negro y gris, colores delicados y colores resistentes. La ropa blanca se desluce rápidamente cuando se lava con otros colores, es mejor lavarla por separado; además, así se puede añadir lejía si hace falta.
La ropa de color negro o gris suele dejar el agua más sucia y eso puede darle un tinte gris a la ropa de otros colores.
La ropa de colores delicados deberá lavarse a una temperatura baja y no conviene mezclar colores.
Cuando los colores son resistentes, se puede mezclar ropa de diferentes colores y lavarla a una temperatura algo más alta.
Dobla la ropa limpia estando de pie. Es un gran ejercicio que ayuda a desarrollar la fuerza y la estabilidad de las piernas, y una de las formas de incluir más actividad en nuestro día sin tener que hacer grandes cambios en nuestras rutinas.
Siempre conviene mantenernos activos